Resulta curiosa la actual situación en el país. La coyuntura económica es dramática, la tragedia personal es constante, desde Alemania se afirma que 2013 no será para España ni mucho menos mejor que 2012, y sin embargo, la bolsa parece haber adoptado una tendencia alcista verdaderamente positiva, que tiene visos de ir a mantenerse. A muchos esta situación les parecerá verdaderamente contradictoria, una bolsa alcista y optimista en una situación como la actual. No obstante, la realidad es que la bolsa nunca ha funcionado en pos de la economía. La bolsa funciona mediante perspectivas de futuro, y el futuro de las empresas cotizadas españolas y sobre todo de las del principal índice español, el Ibex 35 no es nada desalentador, al contrario, en muchos casos se trata de empresas fuertes que sin ser muy grandes, están bastante internacionalizadas, cada vez menos expuestas a España, y cuyas cotizaciones han sido maltratadas por pertenecer al país y por lo que éste actualmente representa; crisis galopante, burbuja inmobiliaria, sistema financiero rescatado, una tasa de paro de las más altas de los países occidentales… Es por todo esto, que la situación no es tan absurda, responde a los ciclos usuales.
No obstante, hablar en el momento actual de invertir en bolsa en cualquier sitio frecuentado por pequeños inversores independientes, ahorradores que lo único que ven es la dramática situación de la economía del país, implica, en muchos casos, recibir miradas de horror de todos los que estuviesen escuchando en ese momento. Ante coyunturas como las actuales el pesimismo es tan grande que puede llegar a paralizar a aquellos que no entiendan mínimamente en funcionamiento de los mercados financieros. En situaciones como la actual, convendría no dejarse llevar por este desánimo, que puede llegar a embotar y evitar que reparemos en las señales que el mercado da, y desaprovechar oportunidades. Y es que, es en momentos como el actual, en los que surgen verdaderas oportunidades en los mercados: pequeñas empresas a precios aún muy bajos que tienen mucho recorrido para subir, grandes clásicos infravalorados que empiezan a subir de nuevo…
Por si fuera poco, hay varios factores que probablemente favorezcan aún más el alza de los mercados de renta variable, tales como por ejemplo el coto a la rentabilidad de los depósitos bancarios y otra renta fija que ha establecido el Banco de España y que el oro y otros valores refugio empiezan a perder atractivo. Inversores institucionales e insiders diversos ya están entrando, convendría no llegar tarde esta vez.